Las cosas son como son y no como nos gustaría fuesen. No podemos controlar lo que ocurre, igual que no podemos ser responsables de lo que hagan los demás, y solo podemos ser responsables de nuestros propios actos y nuestras propias respuestas a los actos de los demás y a las circunstancias de la vida.
Por ello, es importante aceptar lo que la vida nos traiga y dejar de reaccionar para aprender a responder, a dar nuestra propia respuesta auténtica y sincera, no solo la reacción automática que nos sale. Reconocer y asumir esta responsabilidad es primordial para poder tener mayor control y libertad sobre nuestras propias vidas. De esta forma podemos ser más y mejor nosotros mismos y cultivar, progresivamente, más autenticidad.
¿Qué podemos hacer?
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Cultivar la observación
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Tomar distancia de nuestros pensamientos, para dejar de creernos todo lo que pensamos.
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Cultivar la aceptación
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Trabajar el mindfulness y la respiración como herramientas para ganar en control, libertad y autenticidad.
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2. Mindfulnes
Tu concepto o percepción de la realidad no es la realidad. Cuando quedas atrapado en tus percepciones e ideas, pierdes la realidad (Tchit Nhat Hanh).
La mente está activa la mayor parte del tiempo y le encanta vagar por el pasado, o adelantarse al futuro. A este estado de pensamiento, se le llama estado de rumiación y es probablemente la causa y no solamente la consecuencia de la infelicidad. El estado de atención es lo que surge de estar presentes, con propósito, de forma abierta y amable en el momento presente y sin juzgar. Al cultivar el mindfulness, adoptamos una posición neutral como si fuésemos un observador externo.
// Producto Interior Bruto y Felicidad
La renta per capita es importante en relación a la satisfacción con la vida cuando los niveles son bajos. Una vez superado cierto umbral, no se observa que los niveles medios de satisfacción con la vida aumenten cuando incremente la renta per capita.
La correlación entre ingresos y bienestar a nivel individual se extrapola al ámbito nacional. La siguiente figura ilustra la correspondencia entre la satisfacción con la vida y los ingresos medios nacionales en la que puede observarse cómo el bienestar subjetivo de un país aumenta sustancialmente cuando los ingresos medios son bajos y la curva tiende a aplanarse una vez alcanzados unos niveles medios de ingresos (1). En otras palabras, los países con un PIB per capita bajo aumentan rápidamente su satisfacción con la vida cuando este se incrementa y, una vez alcanzado un determinado nivel, la curva se aplana, por lo que un mayor PIB per capita no conlleva mayor satisfacción con la vida. De hecho, los países más felices no son aquellos con los ingresos más altos, sino los más cercanos al cumplimiento de los ODS (2).
Es importante traducir los ingresos per capita en bienestar. Hay países que han sabido hacerlo, como ha sido el caso de China, mientras que otros países, como India, no han sido capaces de lograrlo.
Es importante buscar fórmulas para que los incrementos en renta se traduzcan en incrementos de bienestar
(1) Helliwell, J.F., Layard, R., Sachs, J. De Neve, J.E., Aknin, L.B, & Wang, S., (2021). World happiness report 2021, Sustainable Development Solutions Network, Nueva York. https://worldhappiness.report/ed/2021/
(2) Sachs, J.D. (2019). «Introduction», Global happiness and wellbeing policy report 2019, Global Council for Happiness and Wellbeing. http://www.happinesscouncil.org/